domingo, 30 de noviembre de 2008

la cachorra azul

……
Y cada vez que pierdo el paso
Luz infinita de azul tiñe el cielo
La cachorra azul vuela entre el ocaso
Y el gran bosque rojo es el escondite.

Princesa infinita, se sienta a observarme
Cuando pinto el cielo azul y rojo,
Luego duerme en mi silencio
y me pierdo en el contraste
Las hojas se hacen trémulas,
se engrandece nuestro templo.

E allí como el alba se agita
Y nos sentamos en nubes de colores
A esperar que los cerros coreen nuestros nombres
Y nos regalen destellos de hermosura.

Eres el dulce aroma de la luna
Y la cachorra azul de mis sueños…

Cae la tarde

...es todo penumbroso, silencioso, amargo, alegre...
Muere el sol en la tarde. Todo termina con muebles viejos, nuevos, al final todo mezclados, tras la llegada de la noche. Es todo desolado, ambientado en los sillones del amor y con reflejos de los amantes de cada tiempo, de cada año. Esos amantes que nutrían los cuartos con frases románticas, libres de todo el mundo, libres de la vida misma. Cansados del mundo indiferente, cansados de tener que vivirla.
He vivido en fiestas interminables, todas siempre con melodías eufóricas como introducción a la ya profética final melancólica. Arpegios, risas, bebidas, todas diferentes. Todas iguales. Todas con aroma a despedida, todas con mi triste melancolía.
Recuerdo aún cuando sentado en la penumbra un niño se me acercaba, pensaba, sentía, soñaba, quería ser poeta. Observaba los cuadros, el jardín en el patio, a su abuelo sentado, cogía un papel y escribía lo que podía antes de ser derrotado por la pasión inmensa de los niños, el juego. No sé si él estaba enamorado, no sé si le gustaba lo que hacía, de cualquier forma no era igual a los demás. Yo lo acompañaba junto al sueño de su abuelo, que cansado de tanta vida dormía en uno de los asientos, luego despertaba y él yacía despierto, soñando, creando imágenes, creando historias. Era extraño, nadie lo acompañaba, tan solo yo y la penumbra, después de cada almuerzo, cuando todos dormían la siesta y él se tiraba en uno de los muebles, soñando, enamorándose, quizá de las pinturas, quizá de sus poemas, quizá del amor mismo. Pasó el tiempo, la bohemia me invadió junto a los poemas del niño, que se alimentaban de libertad, amor, y arte. No hace mucho lo vi, tenía la misma mirada perdida, la misma pasión inmensa de los niños y el mismo deseo de ser poeta, le sonreí, se sentó y me comentó como era parte de la lira, mientras se esfumaba el sol en la tarde.

viernes, 21 de noviembre de 2008

Las plumas del amor

-Abatido por la rutina.

alla donde todos caminan sin razon. alla donde las calles cruzan los puentes, y la gente apretan sus abrigos por la mirada del frio y la pena.

un niño despoja sus lagrimas y me mira con lucero de cansancio.

-Otra vez bajo rutina.

sentado, ya a su lado, le comento - es cansado el dia.

me mira con sombra de luna o como pinta de tener esperando varios dias el rocio - quiero volar- culmina.

-Salia a flote.

la frase sono como un tocar de todos los instrumentos, mis pupilas se enfrentaron a un pedir del cielo y entre abiertas sorprendieron sus curso.

-Continuó.

las aves muestran liras que la guitarra se niega a tocar. quiero volar. si de deseos se tratara este seria mi salvacion.

-Otra vez bajo rutina.

es el mejor deseo de todos, pero no creo que se cumpla- notas graves despertaba al viento en forma de cruz y los mezclaba con muerte gris y oscura.

yo si creo- me respondió. y la frase sono como una luz incediandose en la oscuridad que se expandia en colores primaverales. era el fin del mundo, los coros se balanceaban de lado a lado. se destruia mi cuerpo, senti la magia de procesion como fuegos artificiales. senti el canto de las sirenas, la tonada de orfeo, la inmensa belleza dedicadas al atardecer. Era demasiado para un mortal.

-Bañado de belleza.

sin que pudiera decir nada obtuvo el milagro del movimiento y corrió. corrió tanto que llegaba al fin de la pintura en la vista. por una extraña sensacion tomo la forma de un cisne y voló. voló tan lejos que las nubes abrian su paso para sus plumas.

-Las plumas del amor.

amante de la literatura

Me lleno de pasion insaciable de atardeceres de lira, de muerte, de vida.
me lleno de pasion interminable como la noche, durarero como las batallas de piedra sutil y marmol. como cantos de angeles caidos traidos al mundo por un beso de amor, de sauces, de hojas y estanques cristalinos.
me lleno de pasion de caminos interminables como pintados de suaves pinceles, donde no se ven los finales y terminan matando de curiosidad al espectador.
Me lleno de pasion donde no hay rastros de tiempo, donde las personas muestran su desnudez para ser retratados en cincel de lluvia. donde los arboles conversan secretos y llueven piedras rubies como estrellas fugaces que estrellan la luna con el suelo.
Me lleno de pasion insaciable de cantos de pajaros anunciando al crepusculo que llega la noche. donde no existe tiempo, ni carruajes de plata ni de cobre. donde suspira el alma por el agujero negro dejado por una rosa marchita. donde llueven canticos y melodias hacia algun fin de cada dia.
Me lleno de versos melodicos de Mercurio o de Dario.
Me lleno de de pasion insaciable de versos a la locura.
Me lleno de pasion insaciable de ser amante de la literatura...

lira

La lira encantada donde vuelan las aves, donde los dioses descansan su ira, es donde revuelo en mi guitarra a las hojas para convertirlas en flores, donde dibujo tu rostro en la más incesante belleza, para reclinar a los sauces y tener la imagen de un cuarto de ensueño pintado de pequeños y claros colores bañados de rocíos matutinos.
La lira encantada donde surgen los ríos y los peces guardan respeto de procesión al dulce canto ballenal, es donde desnudo el alba y me uno a Orfeo para el pronto cantar de Mercurio. Hermosa lira que desarma a los bosques y los hace entrar en tranquilidad de estanque. Hermosa lira que hace glorificar a los santos, hermosos versos que elevan a los dioses, es como si ante ellos se desasiera todo rastro de inmundicia para el pronto danzar de las nubes.

yo soy parte de la naturaleza

Me gusta ser parte de la naturaleza,
Tan solo móvil por la lira del viento,
Pesado como una roca,
Liviano como una hoja.
Ser una especie más de la belleza
Oscuro como la noche,
Claro como la luna.
Me gusta sentirme libre y ser liberado,
Ver correr a los niños
Y tener al mundo en sus manos.
Me gusta recordar los milagros del movimiento
Me gusta poder olvidarlo todo
Para poder soñarlo después.

viernes, 14 de noviembre de 2008

Unámonos

Cuando no estoy no necesito preguntarme
Si alguna vez pienso en tí
La misma luna brilla
El mismo viento sopla para ambos
Y el tiempo no es sino una luna de papel
No me he ido

Sin embargo me he ido es simplemente como si
Congelase la flor que te roza
Una nueva vida nace
La flor sabe que no hay ningún otro
Que pueda calentar mi corazón tanto como tú
No me he ido

Unámonos a medida que pasa el tiempo
Oh mi amor, mi amor
En la tranquilidad de la noche
Que nuestras velas siempre estén encendidas
Que nunca perdamos las lecciones que hemos aprendido

Teo toriatte konomama iko
Aisuruhito yo
Shizukana yoi ni
Hikario tomoshi
Itoshiki oshieo idaki

Escucha mi canción, todavía piensa en mí
El modo en que llegas a pensar en mí
Las noches se hacen más largas
Pero los sueños perduran
Sólo cierra tus bonitos ojos
Y podrás estar conmigo
Sueña

Cuando no estoy ellos dicen que todos somos idiotas
Y nosotros no entendemos
Oh, sé fuerte, no cambies tu corazón
Nosotros somos todos, tú eres todos, nosotros somos todos a pesar de todo
para siempre

Unámonos a medida que pasa el tiempo
Oh mi amor, mi amor
En la tranquilidad de la noche
Que nuestras velas siempre estén encendidas
Que nunca perdamos las lecciones que hemos aprendido.

Bryan May
(pdta: A la luna de Endimión)

Melancolía pura

Es demasiado para un mortal. Herido de muerte y aun no muero.
No quiero envejecer. Ya no quiero tus besos.
Les soy inmune a las drogas, no terminan de sanar…

Cuanto pesa una noche, cuanto pesa la vida.
¿Con el tiempo debe de pasar?
Gracias delgada melancolía.

canto melancólico

Otra fiesta que termina aquí,
Otro árbol desojado.
Tantas ideas encuadernadas
Y la soledad termina acostada junto a mí.

Verdades, mentiras
Tantas cosas olvidadas en un trago amargo del silencio.

Es el fin de la sonrisa
Despojado de tanta tristeza.
Es el fin de la sonrisa…

Ahora déjame terminar la última gota
Y embriagarme de mis últimos temas.
Me han abandonado mis ganas
Me ha abandonado mi amor.

Otra fiesta que termina aquí.
Ahora acompáñame a mi encierro
Ahora termina de borrar mis sueños.

Otra fiesta de la ciudad viva
Que termina en los melancólicos rastros del silencio…

En algun lugar...

El reloj ni la luz avanzan…

debo estar soñando

que extraña sensación,

hay luces en la fría noche

el fuerte viento me hace volar

y aterrizar en una fina nieve de invierno.

Oh! Que hermosa sensación,

Cisnes, palomas nadan y vuelan alrededor;

y doy vueltas, y vueltas… debo estar soñando.

Hay sauces, con gotas en sus hojas

y llueven pétalos de rosas;

los cielos se tornan rojos,

Oh! Es todo tan hermoso.

Hay algún tipo de magia en el aire,

y las hadas juegan entre las luces del cielo

Debo estar soñando.

Es todo tan quieto y pacifico,

es todo tan hermoso,

la luz sorprende a la tierra

esto es la vida en realidad.

Debo estar soñando.