lunes, 20 de octubre de 2008

dos cuerpos se escapan del día

Nunca supimos de que hablábamos o del porque lo hacíamos, siempre congeniamos, que extraño sentir. Yo la quería, nunca supe si ella sentía lo mismo, no se cuanto hubiera cambiado mi vida si la hubiera besado aquella noche, lo cierto es que nos parecíamos tanto que muchas veces nos comprendimos con tan solo llamas en los ojos o frases sin terminar, no se si así era mejor o peor, tan solo pasaba. Como siempre pasa, dos caminos se encuentran en un solo punto, y la noche de ese punto se hace demasiado larga. Ya al día siguiente éramos perfectos desconocidos que conocíamos nada y todo de uno y el otro. Perfecta confusión.
Nunca supimos de que hablábamos o del porque lo hacíamos, siempre congeniamos, que extraño sentir. Eres única y tú lo sabes, personas como tu tan solo una vez en la vida. Eso le dije en alguna noche fría frente a un parque, quedó confuso el aire y sonrió. A veces siento que me quedan mares de frases por decir, y a veces ya no tengo porque decirlas, por una extraña razón al vernos las frases sobran y las sacrificamos al palpitar del corazón. Curiosos días, parece como si un terco y obstinado destino nos hubiera querido juntar de alguna u otra forma…
Nunca supimos de que hablábamos o del porque lo hacíamos, siempre congeniamos, que extraño sentir. A penas concebí el hecho de que estaba saliendo con alguien, cuando yo terminaba de encontrar el amor en algún otro lado, fue esa noche que enfrascado de recuerdo y confusión, no pude besarla. Me asusta tanto saber que se parece tanto a mí, que al final terminaríamos en mundos distintos sin opción a reclamos. El tiempo juzgaría nuestros días, y hasta ahora quiere que sigamos hablando sin razón, pasando invierno y primavera, uno distante del otro. Que extraño sentir.

1 comentario:

Katy Vega dijo...

me encanto xD! si la escribiste tu!! de vrdad eres un artiista :)!... Deberiias perderte mas seguiido x3